El Deportivo se quedó huérfano ayer de su mito Don Rodrigo
Portero, entrenador y forjador de talentos, falleció a los 100 años ·· Fundó el Club Juvenil y Luis Súarez fue su mejor descubrimiento
Nos dejó don Rodrigo García Vizoso, mito y leyenda viva del Deportivo. Nacido en A Coruña el 26 de febrero de 1909, cumplió su cien años saliendo al césped de Riazor a saludar antes del último encuentro europeo del equipo herculino frente al Aalborg. Allí recibió el cariño que le premiaba por su excelente trayectoria, primero como portero, después como entrenador y creador del Juvenil (Fábrica de Armas) y finalmente como brillante educador de jugadores de la cantera.
Don Rodrigo era el único futbolista que quedaba de la primera liga española. Con el Deportivo participó en la eliminatoria para dar el décimo equipo que disputaría la Primera División y, al no lograrlo el conjunto coruñés, jugaría en él en Segunda División (1928-34). Después ficharía por el Real Madrid -el 15 de mayo de 1932 una actuación suya atajando más de medio centenar de remates supuso que el cuadro herculino eliminara de la Copa al merengue-, sería suplente del mítico Zamora y finalizaría su carrera en el Granada.
En 1940, compaginando con su trabajo en la Fábrica de Armas creó y entrenó un equipo en su Escuela de aprendices. Lo federa en 1942 en la liga local, gana el campeonato gallego de 1945, un año después asciende a Tercera División, cambia su nombre por el de Deportivo Juvenil al pasar a ser filial -descubriendo a Luis Suárez, entre otros-, y en 1954 lo asciende a Segunda División. Posteriormente entrenó el Deportivo en Primera División (1955-56) ganando el trofeo Teresa Herrera, y después estuvo al frente de la cantera deportivista hasta finales de los setenta.
Medalla de Oro al mérito deportivo de A Coruña, desde 2002 su busto preside la Ciudad Deportiva Municipal. Hoy será enterrado a las 12.30 horas en San Amaro, y a las 19.00 horas en los Dominicos habrá un funeral.