Carrumeiro Media, firma ‘made in Bloque’ a la que llovieron contratos

Santiago En junio de 2009, con el Bipartito ya desplazado de San Caetano por el Gobierno Feijóo, saltaba un amago de escándalo: el PP denunciaba que una firma afín al Bloque se había visto beneficiada, mucho, durante el mandato en coalición de socialistas y nacionalistas de 78 contratos que superaban 1,1 millones de euros. La totalidad de ellos llevaron de departamentos bajo control del BNG.

Era la sociedad anónima Carrumeiro Media, fundada el 12 de julio de 2001 por varias personas vinculadas al nacionalismo. Allí figuraba el protagonista de la información de hoy, Xoán Manuel Bazarra, Alberte Soto y Alberte Ansede Estraviz, este último exsecretario de Organización del BNG. Nacía con un capital suscrito de 60.101,21 euros. En 2005, Emilio Pérez Touriño llegaba al poder en San Caetano y empezaban los cambios.

De los nacionalistas antes citados, el propio Bazarra era promovido a jefe de gabinete de la Consellería de Industria por su titular, Fernando Blanco, mientras que el conselleiro de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, situaba a Soto como el secretario general de su departamento. Desde el verano de ese año, cuando tomaron posesión en el Ejecutivo, y octubre de 2006, los dos responsables en San Caetano compaginaron esta labor con la presencia como administradores de Carrumeiro Media. Ansade Anseriz figuraba como presidente de la sociedad.

En el Registro Mercantil, sin embargo, asistimos a una revolución ese otoño. Los tres citados dejan esta nave privada. Toman el relevo otros nombres vinculados al partido nacionalista: la titular pasó a ser Helena Rial; administradores, Aleixo Vilas Henrique Castro, Manuel Martínez y Manuel González, con Artur Manuel Benito Espada como consejero delegado.

La sede social también se alejaba: antes estaba cerca de la del Bloque en la compostelana avenida Rodríguez de Viguri, y saltaba a un local en el Polígono Novo Milladoiro, en Ames.

Dos meses después venía el alud de contratos: distribución de camisetas, chapas, sombreros de paja, organización de conciertos... La vicepresidencia de Anxo Quintana fue la más espléndida, con contratos por 750.000 euros, seguida de Industria (330.000) y Medio Rural (34.700). Fuentes políticas sospechan que detrás de estos contratos, dados los extitulares de Carrumeiro, estaba la financiación del BNG.