Los emigrantes votarán en urna y no lo harán en las municipales

Los residentes ausentes, entiéndase que en su inmensa mayoría emigrantes y sus descendientes, no podrán votar en las elecciones municipales. Sí seguirán haciéndolo en las generales, al Congreso y al Senado, las europeas, las autonómicas y los referendos que se convoquen, y podrán ejercer su derecho en urna en las secciones consulares. La jornada electoral será más amplia pues dispondrán de tres días para acercarse al consulado, el miércoles, el jueves y el viernes previos al domingo electoral español.

En caso de no querer o no poder desplazarse, se mantendrá el sufragio por correo pero tendrá que ser rogado, es decir, que los interesados deberán manifestar su intención de votar tras recibir el impreso de solicitud que le enviará la junta electoral. Se venía haciendo de esta forma precisamente en las municipales. Para acreditar su identidad, deberán incluir una fotocopia del DNI o del pasaporte. Los sufragios, como hasta la fecha, se remitirán por valija diplomática y su escrutinio se realizará en las correspondientes juntas electorales.

Estas medidas se recogen en el informe de la subcomisión parlamentaria encargada de presentar propuestas para la reforma de la Ley Electoral General (Loreg) de 1985. Tras año y medio de trabajo, lo aprobó ayer la Comisión Electoral del Congreso y se plasmará ahora en una proposición de ley. Se prevé que la tramitación se realice en el próximo periodo de sesiones para que las nuevas normativas se apliquen ya en las municipales de 2011. El criterio que se ha impuesto de cara a los comicios locales se corresponde con la recomendación del Consejo de Estado de que la condición electoral en los ayuntamientos esté ligada a la vecindad.

Ente los cambios recogidos en el informe, destaca así mismo la intención de los partidos de ponerle coto al transfuguismo. Cuando se apruebe la reforma, el voto del trásfuga no será determinante a la hora de sacar adelante una moción de censura. Si un concejal cambia de partido, éste necesitará, además de la mayoría de ediles más uno como hasta ahora, otro sufragio a mayores. Si son dos los tránsfugas, dos votos más y así sucesivamente.

La crisis también se refleja en el documento. La austeridad se impone con el fin de evitar los disparatados gastos en campaña. Entre otras medidas, se suprime la publicidad en precampaña y se congelarán las subvenciones a los partidos, una forma también de cerrarle vías a una posible financiación irregular.

De cara a la opinión pública, otros aspectos destacados de la reforma son la prohibición de realizar inauguraciones en campaña e impedir que puedan presentar una lista aquellas formaciones que no condenen el terrorismo.

AMPLIO CONSENSO. El informe recoge las propuestas con mayor respaldo de los grupos parlamentarios y evita aquellas que obligaban a modificar la Constitución. Fue aprobado con 36 votos a favor, uno en contra de Izquierda Unida, y la abstención de Coalición Canaria. El Bloque presentó un voto particular al entender que "desaproveita unha oportunidade para abordar unha reforma de calado". Estima que el voto emigrante por correo debe ser "excepcional e non algo a escoller" y critica que no se vayan a alterar los criterios de proporcionalidad que benefician a los dos partidos mayoritarios.

"Satisfacción" es, mientras, la palabra que utilizan socialistas y populares a la hora de valorar el documento. Desde el PP se califica como un mal menor el hecho de no conseguir respaldo para su propuesta de que debería gobernar la fuerza más votada.