Varela reconoce la charla pero niega que quisiera echar a la trabajadora

“Fue un comentario inapropiado, producto de un calentón, que nunca debí hacer pero que se sacó de contexto”. Adrián Varela, concejal de Deportes en Santiago, reconocía ayer que las palabras que pronunció pidiendo que el delegado de Véndex, Alberto Quintana, despidiera a una trabajadora contratada por esa empresa en una instalación deportiva del concello, no tienen justificación.

El diálogo aparece en el sumario Pokémon en el que está imputado pero, insiste Varela, “mi calentón no tuvo ninguna consecuencia”. “A la trabajadora ni se le despidió ni se le abrió siquiera un expediente. Nada de nada y por eso me extraña el revuelo”, añadió.

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