La guerra de AENA y los controladores se reaviva en el juzgado

El jefe de Control de Lavacolla en el año 2010, Pedro Garea, declaró ayer como testigo en la instrucción de la denuncia contra nueve controladores de Santiago. Según la versión que tras su intervención dio el abogado de los controladores imputados, Diego Salmerón, en la tarde del 3 de diciembre, el día en que se cerró el tráfico aéreo, un "jefe de Madrid" le indicó que "estuviese tranquilo que ya se les iba a militarizar". Las palabras de Garea las interpretan los portavoces de los controladores como una confirmación de que AENA había decidido el cierre del espacio aéreo horas antes de que se desencadenasen los primeros incidentes.

Salmerón también hizo público ayer en la puerta de los juzgados de Santiago que AENA había comunicado a uno de los ocho controladores sancionados de Lavacolla que su castigo quedaba revocado. "Ha tardado dos años en tener este papel", explicó Salmerón, y añadió que, según sus compañeros, "se le cayeron las lágrimas" al recibirlo.

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