El papel de España, clave en la gestión y desarrollo de tecnologías para el espectómetro magnético
Ting elogia el gran avance de los físicos españoles en 30 años de colaboración
Santiago. La aportación de los científicos españoles al experimento AMS tiene, según explicó Samuel Ting a este periódico, dos aspectos fundamentales. En el primero de ellos, "España es responsable del desarrollo de un detector que tiene aproximadamente 11.000 fotosensores, y que puede medir simultáneamente la carga eléctrica y la energía de los núcleos atómicos cósmicos"; un detector muy importante desde el punto de vista del coordinador del proyecto, puesto que "si el resto de detectores no funcionara, éste nos proporcionaría una información muy valiosa".
El segundo frente de colaboración por parte de España ha sido, según Ting, su "importante contribución al desarrollo de tecnologías relacionadas con el uso de imanes superconductores para el espacio. De hecho, una compañía española, Crisa, ha aportado un importantísimo desarrollo técnico para el control del funcionamiento de un imán superconductor en el espacio".
A ello, el profesor Ting añadió la contribución realizada por parte del director del Ciemat, Manuel Aguilar, "en la gestión de la colaboración de las 56 instituciones y 500 ingenieros de 16 países" que participan en este proyecto.
Una colaboración estrecha mantenida con científicos españoles a lo largo de los últimos treinta años, a través de la que ha podido constatar el gran avance experimentado por parte de los físicos del país.
En este sentido, en la rueda de prensa ofrecida tras reunirse con el rector de la Universidade de Santiago de Compostela, Juan Casares Long, manifestó que "en estos treinta años he visto un gran avance por parte de los científicos españoles". Científicos como el profesor de la USC, Bernardo Adeva, quien participó en uno de los cuatro experimentos del acelerador LEP en el CERN que el Nobel dirigió. k.m.